UNA MIRADA TRISTE Y UN SENTIMIENTO HERMOSO.

“Entonces él dijo - Así ¿quién se fijara en mí? – y ahí estaba ella contemplándolo…”

-Corinmey-

Entonces de repente me encontraba sentada en aquel lugar de la iglesia con Clara y aunque no sabía como había llegado a ese lugar, no sentía incomodidad alguna, como las veces anteriores que suelo entrar a las iglesias y puedo percibir esa sensación de escalofríos que tanto miedo me da, así que decidí permanecer sentada en ese lugar observando lo que me rodeaba, desde lo que era el techo con esas imágenes tan impactantes que suelen haber en las iglesias, hasta las personas que se encontraban ahí.

Y como por arte de magia vi a simple vista los rostros de una familia y un sacerdote, pero entre todos esos rostros el que más destaco en mi mirada fue el de él, ese chico que con ojos cristalinos y voz entrecortada, sufría muy dentro de si, lo sé porque que a kilómetros podía oler su llanto y además la tremenda desesperación de sus familiares al no saber que hacer no era para menos.

Entonces comencé a observarlos detenidamente y logre escuchar algunas palabras

-vigílenlo, cuiden todo lo que hace y quienes son sus amistades…- dijo el sacerdote

Así que pensé “tal vez es un drogadicto o un chico con problemas muy fuertes, pero que lindo es…” sin embargo mis pensamientos no vencieron al tiempo y en menos de lo que consta un parpadeo lo vi caer al suelo… si, era cierto lo que mis ojos miraban, el chico se había desmayado.

Al verlo caer quede paralizada y por mi mente paso un pensamiento un tanto ilógico para esa situación, pero no muy aburrido “¿cómo puede ser tan lindo?”, en ese momento no podía creerlo, es más ¿cómo podía ser posible que tuviera ese tipo de pensamientos justo en un instante tan crucial?, no lo sabía, pero entre mi imaginación e ideas revueltas ya estaba ayudando a sus parientes que lloraban inconsolables, además Clara también trataba de calmarlos y cuando eso sucedió esperamos a que el chico despertara.

Cuando despertó tuvieron una charla muy larga de la cual yo sólo pude escuchar algunos fragmentos en los cuales él decía:

-así ¿quién se fijara en mí?- y ahí estaba yo contemplándolo…